(Revista Barriletes, Juio 2016)
Del
cerro viene bajando la vicuñita,
en libertad
Entrevista a René
Salas - Cooperativa de artesanos Sasakuy
Ayqey
vicuñita rispa jap’isunqa Huye vicuñita yendo te atrapara
Rispa
jap’iy pagapiña munasunqa Yendo atrapado en su pago te querrá
(Tema
anónimo, recopilado por Leda Valladares)
En las tierras
del Cacique Viltipoco, en Humahuaca, que lideró los levantamientos
indios en la época de la tercera fundación de Jujuy. Territorio de
luchas junto a los gauchos, contra el invasor español, movimiento
libertario al que se sumaron los Humahuacas, los Tumbayas, los
Tilcaras, los Uquias, los Diaguitas, los Chichas, los Apatamas los
Churumatas...allí se libraron numerosas batallas durante la guerra
por la independencia nacional. Aún respiran en esas laderas las
historias, y entre ellas la resistencia de los pueblos originarios.
La vicuña, es parte de la memoria de los pueblos originarios, y
desde el cerro grita libertad.
Llegando al pueblo
de Uquía, a pocos kilómetros de Humahuaca, a la vera del camino se
encuentra el establecimiento de artesanías regionales, donde se
exhiben grandes madejas de lana cruda, telares al sol, rudimentos
ancestrales del trabajo originario. Allí nos recibió René Salas,
artesano del tejido en telar con lanas de oveja, llama y alpaca.
Forma parte de la Cooperativa Sasakuy
-palabra quechua que significa energía del cerro, energía
de la montaña – Hace doce años que están organizados como
cooperativa. Su sede anterior estaba ubicada en Humahuaca, pero
ahora tienen un lugar propio, en la localidad de Uquía a 300 metros
de la ruta Nacional 9. Está integrada por más de 170 personas que
forman parte de la cooperativa: tejedores, hilanderos de la lana,
pintores que además son alumnos y profesores de la Escuela de Bellas
Artes que funciona en Humahuaca. Escultores, ceramistas, orfebres de
joyería en plata y alpaca, tejidos en telar: aguayos, tejidos a dos
agujas, sacos de llama, bufandas de coloridos autóctonos, con tintas
y pigmentos naturales.
—Todo el trabajo
es hecho a mano – aclara René que recibió a Barriletes una mañana
de sol en la sede de la Cooperativa- Recuerden que Salta y Jujuy no
tienen fábricas, entonces las cosas que se venden en las zonas
céntricas son productos seriados, es decir de origen industrial,
mercadería traída de Bolivia, Perú, y también fabricada en
Mataderos (Buenos Aires) o en Alta gracia (Córdoba) – explicando
así el valor de sostener una cooperativa con materia prima y
productos propios.
—Yo soy originario
de la zona, mis padres y abuelos son de la zona, soy humahuaqueño,
lo que sé tejer lo heredé de mis padres tejo por esa enseñanza
familiar, no hice ningún curso, es una herencia. Esto trato de
inculcarle a mis hijos, ojalá puedan seguir lo que yo hago. Soy
docente de la escuela primaria, no hay muchos cargos por esta zona,
por ello me tendría que ir al campo, pero he decidido continuar
tejiendo. Sí, trabajo de maestro en las escuelas de verano, el
período es desde setiembre a junio de cada año.
—Yo trabajo la
lana de oveja, la lana de llama y la lana de alpaca. Muy poco se
trabaja la lana de vicuña, que es muy cara: sale $22.000 el kilo,
porque su pelo es muy corto, cada dos años que se esquila la vicuña
(en los meses de octubre/noviembre) , solamente nos puede llegar a
dar 100 o 120 gramos de lana. En cambio a la alpaca se la puede
esquilar al ras, te puede dar de 600 a 800 gramos por año; la llama
es diferente, tiene mayor rendimiento, te puede dar entre 3 a 6 kilos
por año. Estos últimos son animales domésticos, podes tenerlos en
tu casa, en un corral, pero la vicuña no, es un animal de montaña,
silvestre, si lo maltratás se muere enseguida, es muy delicado.
-Espero nos puedan
visitar algún día – dijo René como despedida- después de
Tilcara a 60 kilómetros esta Uquia donde está nuestro local.
Y la Pachamama
contenta de ser parte de este ritual. Una iniciativa que protege la
producción de los pobladores de la región, y preserva las
tradiciones más antiguas y milenarias. En estas tierras, el cielo se
ve más azul y emancipado.
Comentarios